En este artículo te hacemos una introducción al mundo del Big Data y teoría de grafos, analizando para qué sirven a efectos prácticos.
Lo cierto es que el Big Data se ha vuelto aún más popular en los últimos años (tanto dentro como fuera del entorno tecnológico). Hoy en día, el mundo en el que vivimos está más hiperconectado que nunca. Sin duda alguna la tecnología ha cambiado la forma de relacionarnos, de divertirnos, de hacer negocios, entre otras muchas cosas.
El desarrollo de la tecnología ha ayudado a mejorar la vida tal y como la conocemos, pudiendo sacar información prescriptiva de los datos que se generan y gestionan.
Big data para el mundo real
El término Big Data se ha usado para referirse a los “grandes volúmenes y variedad de datos”. De ahí se incluyen los datos estructurados y los no estructurados que se producen diariamente.
En estos datos, podremos encontrar grandes volúmenes de información vital para las empresas.
No obstante, lo realmente interesante del Big Data no es sólo el volumen que aporta, sino lo que podemos obtener de ellos al analizarlos.
Actualmente las empresas usan herramientas tecnológicas de gran potencia para poder procesar ese gran volumen de información. De esta manera, desarrollan procesos, descubren gustos y también las preferencias de los usuarios. Todo ello con el objetivo de enfocar mejor los servicios que ofertan.
No obstante, lo primero es entender por qué este tipo de datos es importante. Lo principal es saber la fuente u origen de los datos. De esta manera podemos generar datos de la propia conexión a internet o bien del internet de las cosas.
Cuando estamos tratando con diferentes tipos de software, tendremos datos estructurados o semi-estructurados. Normalmente, los datos estructurados serán el mínimo. Esto hará que conseguir información correctamente analizada pueda suponer un reto. No obstante en este punto entra la teoría de grafos.
¿Qué debes saber sobre la teoría de grafos?
Lo primero que debes saber es que los grafos son estructuras de especial importancia en la que podemos almacenar cantidades grandes de información. Los grafos empezaron a idearse cientos de años atrás, permitiendo entender las conexiones entre los datos que conectan. En el siguiente vídeo de la comunidad Machine Learning Spain puedes entender mejor la teoría de grafos de la mano de grandes profesionales que los trabajan en su día a día.
Para que lo entiendas de forma simple, la teoría de grafos se basa en que estos tienen una composición de nodos, que permiten encontrar diferentes tipos de datos, relacionándolos o conectándolos a través de aristas.
Los grafos permiten hacer un seguimiento detallado de la información, haciéndola entendible para poder tomar las decisiones correctas. De esta manera también se consiguen saber las interrelaciones entre los datos, cobrando una especial importancia con el análisis de Big Data.
El Big Data, se encarga de concentrar, analizar y gestionar cantidades gigantescas de datos y los grafos nos van a permitir entender esos datos para conseguir un diagnóstico a partir de ellos.
Los grafos atienden las principales dificultades del Big Data
Sin duda alguna, los grafos ayudan a atender las principales dificultades del big data.
Cuando se consigue un gran volumen de datos, se necesita desarrollar un sistema que permita recolectar, limpiar, integrar y obtener conclusiones en un tiempo de análisis corto.
Cuando se consiguen reducir los tiempos de análisis, se permite optimizar la toma de decisiones.
Lo más importante de vincular el Big Data con los grafos, es que ambas son áreas muy potentes que pueden aplicarse a diferentes departamentos dentro de la empresa, consiguiendo resolver múltiples problemas.