La inteligencia artificial está cambiando el mundo en muchos ámbitos de nuestra día a día y uno de ellos, sin duda, es la medicina. Vamos a ver a continuación ejemplo del uso de inteligencia artificial en salud que combinada con técnicas de ciencia de datos y big data ya mejoran la vida de muchas personas.
IA para detectar el cáncer
Un ejemplo de inteligencia artificial en salud es la detección del cáncer. En el caso de esta enfermedad, los algoritmos basados en IA permiten detectar mutaciones genéticas e interacciones de proteínas peligrosas en una etapa temprana.
Microsoft, por ejemplo, ha creado ‘Inner Eye’, un software que combina Machine Learning (ML) y el Procesamiento de Lenguaje Natural (PNL). Así puede ayudar a los oncólogos a identificar el tratamiento más eficaz para cada paciente.
El software permite identificar mutaciones genéticas e interacciones de proteínas peligrosas en una etapa temprana. Incluso es posible predecir cómo responderán las células individuales dentro del tumor según qué tratamiento.
Detección precoz de Alzhéimer
Se están desarrollando software tecnológicos que escanean los patrones del habla y el vocabulario para detectar los primeros signos de Alzheimer.
Gracias a la IA, se pueden detectar cambios sutiles en el habla y el comportamiento. Esta detección es más rápida y confiable que las observaciones humanas.
El objetivo es implementarlo en una aplicación para smartphones. Esta app facilitará el diagnóstico de una forma más barata y accesible que pruebas médicas tradicionales.
Gracias al PNL, el algoritmo puede estudiar detenidamente las conversaciones del paciente. Y es capaz de analizar la variedad de las palabras que las personas están usando para evaluar su estado cognitivo.
También se usa Computer Vision para analizar las expresiones faciales junto a las palabras que dicen los pacientes en una entrevista. Además, de examinar las señales acústicas de la conversación.
La aplicación recopila los datos y luego les da una puntuación sobre el riesgo y probabilidad de que muestren signos de demencia.
Inteligencia artificial en salud y big data
Análisis de información de valor sobre tratamientos
Las IA permiten a los médicos buscar y encontrar información en publicaciones médicas no estructuradas. De este modo pueden apoyar sus decisiones sobre la atención al paciente.
Asistencia al usuario
La IA en salud puede ayudar a buscar y presentar datos a las personas, asiste al ahora de encontrar información completa sobre la salud, lo que da lugar a usuarios más y mejor informados.
Identificación de la información de valor en los datos del paciente
Las herramientas de IA pueden buscar información relevante en registros médicos estructurados y no estructurados para proporcionar casos de pacientes relevantes que puedan ayudar a la resolución de un caso,
Identificación de similitudes y patrones
La Inteligencia artificial es especialista en identificar patrones en grandes cantidades de datos. Esto puede ayudar a los investigadores a crear grupos dinámicos de pacientes para estudios y ensayos clínicos.
Detección de imágenes
El análisis de imágenes es otro campo donde la IA tiene una gran relevancia y utilidad.
El proyecto iFind, por ejemplo, analiza imágenes fetales durante el embarazo para detectar posibles problemas en la gestación.
Otro ejemplo es el programa REiLI, un conjunto de soluciones que agrupadas de 70 sistemas de reconocimiento de imagen. A ellos se les añadiendo nuevas aplicaciones que apoyan al diagnóstico médico.
También Synapse 3D, es un software avanzado de Fujifilm para procesar y analizar imágenes médicas, cuya uso va desde la radiología a la cardiología.
La IA en el campo de la genética
En esta área, un ejemplo es la compañía americana FDNA, que ha creado un sistema de reconocimiento facial integrado en una base de datos que contiene más de 8.000 trastornos genéticos y enfermedades raras.
Utilizando una tecnología de fenotipado de próxima generación (NGP) de FDNA puede secuenciar y analizar genomas con el fin de acelerar el diagnóstico. Además, reduce y evita el riesgo de dar diagnósticos erróneos.
La compañía también ha creado una aplicación llamada Face2Gene que permite el intercambio de los datos de esta herramienta entre centros médicos de 130 países.
Prótesis inteligentes con IA
Ya existen prótesis inteligentes que son capaces de aprender de la persona que la lleva. Esto permite adaptarse mucho mejor a sus necesidades y movimientos.
Estas nuevas prótesis memorizan los patrones de movimiento de la persona y suelen estar controlados mediante una aplicación.
Tratamientos farmacológicos
En el ámbito de la farmacología tiene muchas aplicaciones. Una de las más utilizadas es analizar secuencias genéticas, para, por ejemplo, encontrar y desarrollar vacunas, o crear tratamientos para enfermedades determinadas.
Inteligencia artificial para tratar la diabetes.
Pepper es un proyecto que trata de calcular, mediante inteligencia artificial, las dosis exacta de insulina adecuada para un paciente con diabetes.
El proyecto tiene como objetivo la investigación para ayudar en la gestión de enfermedades crónicas que haciendo predicciones basadas en datos en tiempo real, con el fin de empoderar a las personas a participar en el auto-manejo de su enfermedad.
Robótica e inteligencia artificial en salud
El uso de la inteligencia artificial en la salud y la robótica harán crecer en gran medida las herramientas médicas de precisión para su uso, por ejemplo, en cirugía.
Esto permitiría, por ejemplo, realizar cirugías menos invasivas y con mayor precisión con una recuperación más rápida.
Atención al usuario, le mejora de la experiencia con inteligencia artificial en salud
Otras áreas, donde la IA está cobrando mucha importancia, es la atención al cliente. La IA ha facilitado, por ejemplo, la forma en la que se realizan citas médicas con la creación de chatbots que funcionan las 24 horas del día y son capaces de responder a gran cantidad de cuestiones de los usuarios.
IA en nutrición
Existe ya algunas aplicaciones que utilizan algoritmos para facilitar el seguimiento de una dieta equilibrada.
Son capaces de analizar cuestiones tan variadas como picos de glucosa y situaciones de hipoglucemia o la falta de determinados nutrientes. Si cuentan con todos estos datos, son capaces de crear una dieta saludable adecuada para cada persona con sus circunstancias determinadas.
Las aplicaciones de la inteligencia artificial en salud son ya una realidad, pero su potencial todavía es muy grande y en los próximos años serán muchas las innovaciones que llegaran a este campo para mejorar la vida de las personas.
